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1.4 Compartición de recursos
1.4.1 Definiciones
La arquitectura cliente-servidor es la base para la utilización
de los recursos disponibles en una red:
-
Cliente: entendemos como tal cualquier ordenador,
conectado a una red, de cualquier tipo.
-
Servidor: es también, un ordenador, conectado
a una red, pero que tiene algún recurso que puede ofrecer a
la red.
Como vemos estos dos términos son inseparables, el cliente solicita
algún recurso y el servidor los ofrece. Es un proceso cooperativo
entre cliente y servidor.
Normalmente, el servidor es un ordenador más potente y con más
recursos que el cliente, pero no siempre es así.
Entendemos por recurso:
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Hardware: distintos periféricos de entrada
o salida, impresoras, escáneres, cámaras, sistemas de
almacenamiento de datos, etc.
-
Software: cualquier tipo de aplicaciones, paquetes
de programas, programas, etc.
-
Información: todo tipo de datos; de texto,
numéricos, bases de datos, imágenes, audio, etc.
1.4.2 Compartición de Recursos
Como ya hemos indicado, una red de ordenadores es, “un conjunto
de ordenadores conectados entre sí y que pueden compartir información
y recursos”. Es decir, los recursos instalados en un equipo pueden
ser utilizados por el resto de equipos y usuarios
de la red. Para limitar los accesos de los usuarios se pueden aplicar
permisos y políticas.
a) Principales recursos para compartir
Conviene destacar que, de todos los recursos que pueden ser utilizados
en una red local, los que nos van a ofrecer mayores ventajas a la hora
de ser compartidos son:
Unidades de almacenamiento:
En una red pueden compartirse, discos duros, unidades de cd-rom, particiones
de disco, etc. Proporcionándonos un gran ahorro en la adquisición
de estos materiales.
Sin embargo, más importante que este ahorro, es el poder tener
la información centralizada, evitando la repetición y la
dispersión de estos archivos.
Esto facilita el trabajo en común, ahorrando esfuerzo y costos
a la vez que se garantiza la seguridad ante pérdidas o deterioro
de la información, ya que al estar centralizada, las copias de
seguridad son más sencillas de realizar.
Servidor de aplicaciones:
En lugar de tener una misma aplicación instalada en cada ordenador,
es mejor tener una única para todos los que la utilicen. Con esto
ahorraremos costes y facilitaremos el mantenimiento (reparaciones, actualizaciones,
etc...).
En este sentido, son muy importantes las aplicaciones tipo groupware,
que son aquellas que se utilizan para trabajar en grupo, por ejemplo:
calendarios de grupo, planificación de trabajos de grupo, correo
electrónico, etc... El incremento de productividad que esta forma
de trabajar conlleva, es obvio.
Impresoras:
Las impresoras, son uno de los elementos más caros de los periféricos
de una red informática, por tanto el hecho de poder minimizar el
número de ellas, redunda en un importante ahorro de costes al realizar
un uso más racional en la adquisición de este tipo de recursos.
Evitamos tener que trasladarnos con la información de un equipo
a otro y ahorramos tiempo y espacio en nuestro aula, centro, etc.
Así, podremos adquirir mejores impresoras en lugar de disponer
de un mayor número de ellas, aunque de menor calidad.
Acceso compartido a Internet
Otra de las grandes ventajas de una red es el poder acceder a Internet
a través de un servidor o mediante un acceso compartido. Todos
los equipos, empleando una única conexión: RTB,
RDSI, ADSL, etc. pueden obtener las ventajas de los servicios de Internet:
correo electrónico, FTP, news, WWW, etc.
Cuando disponemos de un acceso a Internet de este tipo, podemos, además,
establecer una serie de medidas de seguridad mediante un cortafuegos que
evite el acceso a contenidos inadecuados para el ámbito educativo
a la vez que protegemos nuestra red del ataque de intrusos.
b) Recursos según la organización de la red
Según su tipo de organización, podemos tener una red:
-
Distribuida: en este caso los
recursos estarán distribuidos entre los distintos ordenadores
que conforman la red y cada uno podrá, o no, ofrecer a los
demás los recursos de que disponga.
-
Centralizada: en este caso los
recursos estarán centralizados en un ordenador servidor, y
los demás ordenadores accederán a él solicitando
sus recursos.
-
Mixta: es una mezcla de ambas,
con parte distribuida y parte centralizada. El grado de centralización
puede ser variable en cada caso.
1.4.3 Arquitectura cliente-servidor
La arquitectura de tipo Cliente-Servidor, se caracteriza porque tiene
sus recursos distribuidos entre los distintos ordenadores que forman la
red y cada uno podrá, o no, ofrecer a los demás los recursos
que posea. El grado, menor o mayor, en que estén distribuidos,
puede ser muy variable. Esto implica un tráfico por la red, de
todo tipo de objetos, no sólo datos. La red se convierte así
en un elemento crítico y, con ella, la figura de administrador
de la red. El objetivo es proporcionar más potencia al usuario
final, con el objetivo de aumentar la operatividad.
El hecho de adoptar este tipo de arquitectura, aparte de afectar al entramado
de hardware y software, supone cambios en la estructura de funcionamiento
de un sistema de información.
La arquitectura Cliente-Servidor supone, normalmente, una mezcla de hardware,
software y componentes de red, de distintos fabricantes. Por tanto tienen
que ser arquitecturas de sistemas
abiertos, capaces de utilizar hardware y software de distintos fabricantes,
en contraste con los sistemas cerrados, o de un sólo fabricante.
Si se quieren minimizar los costes de software y mantenimiento, el software
debería residir en el servidor y, cuando el cliente lo ejecute,
cargarlo en su memoria.
a) Seguridad
Un tema importante en este modelo es la seguridad. Normalmente los servidores,
debidamente configurados por el administrador, son los encargados de pedir
las passwords
necesarias, de identificar a los usuarios, de conceder los permisos pertinentes
para acceder a los distintos recursos, etc.
La seguridad es un tema clave a la hora de determinar una arquitectura.
Cuando utilizamos un modelo centralizado garantizamos la seguridad desde
todos los puntos de vista, sin embargo, cuando empleamos redes entre iguales
obtendremos un nivel de seguridad mucho más bajo.
b) Modelos de arquitectura cliente-servidor
-
Modelo basado en servidor: en
este modelo los datos residen en el servidor, pero además,
hay una serie de procesos que se ejecutan también en él.
Las aplicaciones cliente-servidor, en realidad se componen de dos
partes, aplicación cliente, que se ejecuta en él, y
aplicación servidor, que se ejecuta en el servidor.
-
Las redes “peer to peer” o
“punto a punto”,
se pueden considerar un caso particular de este tipo de redes. Estas
redes no tienen servidores, propiamente dichos, aunque, cada ordenador
puede tener algunos recursos y puede ofrecerlos al resto de los ordenadores,
o a algunos. En este sentido, se les puede considerar servidores.
Aquí, los ordenadores pueden ser tanto clientes como servidores,
dependiendo de que soliciten u ofrezcan algún recurso.
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Basada en correo electrónico (e-mail):
todas las funciones son ejecutadas por el cliente y sólo las
funciones de mensajería están en el servidor.
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Base de datos compartida: todas
las funciones son ejecutadas por el cliente, pero los datos están
en el servidor. El cliente carga la aplicación en su memoria
y esta aplicación hace las llamadas necesarias al servidor
de datos.
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